El virus de la influenza mejor conocido como la gripe, es más fácil de diseminar de lo que se pensaba, según un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Maryland en Estados Unidos y financiado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y los Institutos Nacionales de Salud.

 

Por mucho tiempo se ha creído que podíamos contraer la gripe al exponernos a la tos o el estornudo de una persona infectada o al tocar superficies contaminadas, sin embargo, los nuevos datos sobre la transmisión de la gripe revelan que podemos contagiar a otros simplemente por medio de la respiración.

«Descubrimos que los casos de gripe contaminaban el aire que los rodeaba con virus infecciosos simplemente al respirar, sin toser ni estornudar», explicó Donald Milton, líder del estudio. «Las personas con gripe generan aerosoles infecciosos (pequeñas gotas que permanecen suspendidas en el aire durante mucho tiempo) incluso cuando no están tosiendo, y especialmente durante los primeros días de la enfermedad. Por lo tanto, cuando alguien contrae el virus de la influenza, debe irse a casa. y no permanecer en el lugar de trabajo e infectar a otros «.

En los primeros días de la enfermedad generamos gran cantidad de aerosoles infecciosos ¿y las pruebas? Los investigadores capturaron y caracterizaron el virus de la influenza en el aliento exhalado de 142 casos confirmados de personas con gripe durante la respiración natural, hablando, con tos espontánea y con estornudos y evaluaron la capacidad del virus para infectar mediante pulverizadores. En total se obtuvieron 218 frotis nasofaríngeos y 218 muestras de 30 minutos de aliento exhalado, tos espontánea y estornudos el primer, segundo y tercer día después de la aparición de los síntomas de la gripe.

Los análisis de las muestras evidenciaron que un número significativo de pacientes con gripe eliminaban el virus infeccioso de forma rutinaria, con partículas lo suficientemente pequeñas como para presentar un riesgo de transmisión por el aire.