SI tienes un hijo que de plano se distrae con TODO, no lo dejen pasar, tal vez tenga un trastorno que pudiera estar afectando su desarrollo emocional.

En esta ocasión te ayudamos a conocer la respuesta sobre las siguientes preguntas: ¿Tu hijo o algún niño que conoces se distrae con cualquier cosa? ¿Mientras está en clase o tú le estás explicando algo, parece que está en la Luna, a mil kilómetros de ti? ¿Es retraído? ¿No muestra interés por hacer amigos, jugar fut, pertenecer a un equipo? ¿Se tarda en completar actividades que implican hacer diferentes pasos? ¿Es soñador?

No te quedes con la idea de que es tímido y mucho menos de que no es suficientemente inteligente. Tal vez tenga un trastorno que con el tratamiento y la guía adecuada no le va a afectar para nada en la escuela o en su desarrollo emocional.

Mucho se habla desde hace algunos años del Trastorno de Déficit de Atención y dentro de todo lo que se ha investigado, se ha distinguido que hay un subgrupo de niños que comparte ciertas características de este Trastorno pero que parece tener otras características particulares llamado Tempo Cognitivo Lento (TCL) y en inglés SCT (Sluggish Cognitive Tempo).

El término Sluggish no tiene una traducción directa al español y en inglés significa algo así como estar aletargado, o moverse lentamente. Hace referencia a esas veces que pareces “estar en las nubes” o “estar en la baba”. Todavía no hay un término en español que sea aceptado completamente por los especialistas que describen este Trastorno, y se espera encontrar otra nominación más precisa, por lo pronto Tempo Cognitivo Lento es el que se utiliza para describirlo.

Es importante reconocer que los síntomas de este Trastorno, no se encuentran específicamente reconocidos en los manuales médicos que permiten el diagnóstico en la actualidad y siguen siendo tratados por los especialistas como un TDAH. Diferencia entre Tiempo Cognitivo Lento y Trastorno por Déficit de Atención.

Las personas con TCL presentan mayores dificultades en:

– Habilidades de la atención sostenida y selectiva

– Variabilidad en memoria espacial

– Dificultades en su capacidad de alerta

– En la memoria de trabajo

– En la comprensión de señales sociales

– Dificultades en organización y resolución de problemas.

Es evidente que también las personas con TDAH también son lentos al ejecutar tareas, pero existen diferencias específicas, y es que en el TDAH la lentitud ocurre por su limitada capacidad de inhibición de distractores, mientras que en el TCL se debe a la lentitud de la ejecución propiamente dicha.

¿Cómo se trata?

-Lo importante de saber describir un trastorno es que lo expertos pueden estudiar cuál es la mejor forma de ayudar a las personas que lo padecen.

-Tener TDAH o TCL no hace a tu hijo tonto ni de lento aprendizaje, sólo necesita desarrollar las herramientas que le permitan desenvolverse en la escuela y con sus pares de la mejor manera.

-Existen tratamientos con medicamentos y terapias de aprendizaje y conductuales que les permiten socializar, organizarse y entender mejor los procesos.

-Antes de que tu pequeño sea etiquetado, busca la evaluación profesional.

-No se trata de que todos los niños en la escuela se porten igual y no den lata, si no de que cada niño reciba las herramientas personalizadas que necesita para aprovechar al máximo su capacidad y para no sentirse relegado o desconcertado en el salón.

Conclusión

Hasta el momento no se ha alcanzado un consenso respecto a si el TCL forma parte del grupo de TDAH con predominancia inatenta, en donde existen altos niveles de inatención, pero no hiperactividad ni impulsividad.

Las investigaciones actuales proponen entender el TCL como una entidad diferente y aun cuando se siga considerando como parte del TDAH de predominancia inatenta, este tipo de estudios permiten a los especialistas buscar nuevas formas de entendimiento e intervención para los diferentes problemas que tienen nuestros pacientes.

Conocer estas investigaciones y los hallazgos permiten ofrecer una intervención más sistematizada y más reflexiva por parte del especialista, donde por ejemplo se aborden las características descritas del TCL no solo desde las dificultades en la inatención sino al mismo tiempo en los problemas relacionados a la velocidad para procesar información, organizarla y recordarla en conjunto con los síntomas emocionales que estos conllevan, por ejemplo, aspectos de ansiedad o depresión.