Si a estas alturas sientes que no te has desintoxicado de las fiestas, las vacaciones y definitivamente quieres mejorar la silueta y adquirir nuevos y saludables hábitos alimenticios, te tenemos una propuesta para perder kilos con claves para llevarse a cabo en la oficina.

No es sólo un plan detox para deshacernos de los kilitos que el alcohol y los dulces nos dejaron después de las fiestas y las vacaciones. Esta dieta busca ir un paso más allá. El objetivo es no sólo mejorar la figura, sino también adquirir una forma de comer que mejore nuestra belleza y salud.

La idea es que, sin hambre, pero con criterio de moderación, logremos mejor peso y salud.

Desayuno

#1 1 vaso de agua, 1 toronja, 1 rodaja de queso light, 2 nueces, 1 taza de té o café solo o cortado (sin agregado de azúcar)

#2 1 vaso de agua, 1 pera cortada, 1 huevo a la plancha o en sartén antiadherente (asado, omelette), 1 cucharada de semillas de chía trituradas para espolvorear, 1 taza de café con leche.

Para arrancar el día

Debes reconocer siempre que es una comida importante. No puedes comenzar tu día sin nutrientes: son indispensables proteínas, vitaminas, minerales. Todo tiene que estar presente en el desayuno: líquidos (no sólo infusiones sino también agua), fruta, algún alimento proteico magro y grasas buenas.

Almuerzo

#1 Salpicón de blanco de pollo con tomate, zanahoria rallada, pepino, apio y 3 cucharadas de arvejas. Aderezar con 1 cucharada tamaño postre de aceite de oliva y vinagre.

#2 Lenguado a la plancha con cebolla, ají y provenzal con gotas de oliva. Ensalada de hinojo, tomates cherry y 3 cucharadas de granos de choclo cocidos. Aderezo con 1 cucharita de oliva y jugo de limón o vinagre.

#3 Pechuga de pollo a la plancha con ensalada de repollo morado y blanco, zanahoria rallada y 3 cucharadas de arroz cocido. Puedes Aderezar con 1 cucharada sopera de mayonesa light batida con 2 de agua.

#4 Costilla de cerdo magra a la plancha o rojos con salsa criolla: cebolla, tomate y ají

Tips para el almuerzo

Es importante consumir un plato único. Lo deben integrar:

Proteínas magras, porque la actividad intelectual continúa: pechuga de ave, pescados blancos y dos veces en la semana -no más- una porción moderada de carne roja magra. Bastante volumen para saciar tu apetito: agua (puede ser con gas) y ensaladas crudas. Y algo de buena energía que permita ser utilizada de manera lenta: algún grano entero o legumbre o tubérculo, pero siempre con fibras. Para finalizar, un sabor dulce: reservarte para el final un vaso de algún jugo o gaseosa sin azúcar ni calorías.

Merienda temprana

#1 Yogur 0% de grasa, firme 4 uvas

#2 Batido con un vaso de yogur bebible 0%, 1 durazno o pelón o 4 frutillas fileteadas

#3 Licuado con un vaso de leche descremada y ½ manzana verde y hielo o con ½ banana chica y hielo

Merienda tardía

#1 Platito con tomates cherry 4 cubitos de queso light

#2 Dos claras de huevo duro. 1 remolacha cocida cortada en cubos ¼ de manzana verde en cubitos.

#3 Rodaja de ananá en cubitos. 1 platito con tomateros cherry 1 platito de pickles

Para pasar la tarde

El plan propone dos meriendas, una temprana para «picar» en la oficina, entre las 16 y 16.30 y una tardía, entre las 19 y 20, al llegar a casa. Para la primera podrás optar entre yogures, batidos y licuados frescos 0% grasa. También frutas (pequeñas), para copas frescas y licuados. agrega hielo y agua para aumentar volumen sin calorías. Para la segunda, la propuesta es salada. La bebida indicada deberá ser refrescante, pero sin calorías. La idea es que tomes la segunda merienda con tranquilidad, sentada y consciente de lo que «picas».

Colación. Té verde (opcional edulcorante). Agua con jugo de limón (opcional edulcorante). Gelatina light

Cena

#1 Revuelto de zapallitos cocidos en su jugo con 1 cebolla, ½ ají verde, ajo, rehogados en una cucharada tamaño postre de aceite de oliva. Agrega un huevo batido para finalizar.

#2 Brochette de camarones y rodajas de pepinos frescos o pickles, aderezada con jugo de limón o de pomelo. Brócolis al ajillo aderezados con

1 cucharada tamaño postre de aceite de oliva.

A la hora de la cena

Será un plato único, pero abundante. No midas las cantidades, los alimentos no sumarán muchas calorías. Podrás consumirlo tibio, frío o caliente. La base de verduras cocidas te asegurará mejor digestión y amanecerás con el abdomen bien chato.

Llevará también una proteína, pero diferente a la del almuerzo. Si la temperatura baja, puedes reemplazar el plato propuesto por una buena sopa de verduras.

Como postre, 1 porción -no más- de una fruta ácida: 1 ciruela negra grande, 1 kiwi, 1 rodaja de ananá, 1 compotera de frutillas frescas fileteadas o 1 mandarina.