La familia Padilla Vázquez se quedó sin nada después de que un incendio destruyera su casa. Afortunadamente, los vecinos pusieron rápidamente a salvo a 4 niños y a sus mascotas, al tiempo que trajeron suficientes muebles para todos ellos en orden, aunque perdieron la mayor parte de lo que había dentro debido a la falta de cumplimiento de las normas relativas a los detectores de humo.
El martes por la tarde, cuando las vidas de todos cambiaron para siempre a causa de una tragedia inolvidable, esta pequeña ciudad se unió como una unidad en situaciones de crisis como incendios u otras catástrofes en las que los amigos pueden necesitar ayuda en cualquier momento.