El llanto de los bebés es su manera de comunicarse con nosotros y de pedirnos ayuda para que hagamos algo, y la reacción lógica de los padres es intentar calmar a los bebés, retornarles a un estado de calma en que se encuentren bien de nuevo.
Uno de esos momentos es cuando quieren hacer caca y no lo consiguen, y es un momento duro porque los padres desearían hacer algo y no saben qué, y ven que el bebé hace fuerza, se pone rojo, se arquea y llora sin conseguirlo. Es lo que se conoce como disquecia del bebé, y hoy os vamos a decir qué es.
¿Disquecia del bebé, pero eso no es estreñimiento?
Cuando un adulto no consigue defecar sufre, se queja, hace esfuerzos y siente dolor para echar el bolo fecal porque está duro y es relativamente grande. Es lo que conocemos como estreñimiento. Por este motivo, los padres solemos hacer una regla de tres al ver en nuestro bebé los mismos síntomas: se queja, hace esfuerzos, llora, se pone rojo, se arquea y parece que sufre para hacer caca. Después la hace, al final, y entonces se queda tranquilo. ¿Conclusión? Pensamos que tiene estreñimiento, porque todo coincide.
Sin embargo no todo coincide, porque lo que motiva esos síntomas en los adultos es que las heces son duras, pero los bebés cuando hacen caca la hacen deshecha, prácticamente líquida, con algunos grumos, pero totalmente blanda. Sólo la suelen hacer más bien pastosa, con más densidad, cuando toman leche artificial, que se digiere peor que la leche materna.