Con la formación de un inmenso lazo humano rosa, en la que participaron alrededor de 15 mil asistentes, dio inicio la campaña del mes de octubre para prevenir y evitar que el cáncer de mama se mantenga como la principal causa de muerte entre mujeres en México, con más de 5 mil 680 decesos anuales.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), encabezado por Mikel Arriola, convocó a sobrevivientes, organizaciones civiles, empresarios, médicos y aliados estratégicos como es el Instituto Nacional de Cancerología (Incan) y su patronato a que durante todo el mes la sociedad tome conciencia de la importancia de combatir ese tipo de tumores.
Un lazo humano y el encendido de edificios con el color rosa, señaló Arriola, “forman parte de toda una campaña para generar conciencia e implementar programas efectivos basados en promover la prevención y detección oportuna de la enfermedad a través de la difusión de información, incrementando las pruebas de detección mediante mastógrafos”.
El lazo humano rosa de este año rompió el récord de asistentes al congregar miembros de la sociedad civil, enfermeras del sector Salud, el DIF y la Secretaría de la Defensa Nacional, ya que en 2016 ese símbolo de la lucha contra el cáncer de mama juntó a 11 mil 200 participantes
Ante el presidente Enrique Peña Nieto y su esposa, Angélica Rivera, el director general del IMSS anunció que invertirá 360 millones de pesos durante el ejercicio 2017-2018, en reforzar el esquema preventivo e incrementar el número de mastografías para revertir el hecho de que 90 por ciento de los casos de cáncer de mama se detecta en etapas avanzadas.
“En este año ya se han destinado 265 millones de pesos en la compra de 53 mastógrafos, lo que equivale a 74 por ciento del monto comprometido. El año pasado el Seguro Social invirtió más de 69 millones de pesos en una Clínica de Mama en la Delegación Ciudad de México Sur y en 2017 se pondrá en marcha una nueva Clínica en la Delegación Ciudad de México Norte, con una inversión de 70 millones”, detalló.
En esta administración, explicó Arriola, se pasó de 1.1 millones de mujeres detectadas a 6.2 millones entre 2013 y 2016, lo que representa un aumento de 20 por ciento y, con ello, se contribuyó a que hubiese una disminución en la mortalidad por cáncer de mama de 18.6 por ciento entre las derechohabientes del IMSS.