Emma Heming, esposa de Bruce Willis, pidió a los paparazzi que le dejaran espacio después de que algunos fotógrafos quisieran hablar con él cuando le vieron por la calle.
Heming cree que ese acercamiento podría haber provocado una reacción adversa en el actor de 67 años.
Les pidió que mantuvieran una distancia de seguridad y que no le gritaran cuando le persiguieran por la calle.
Heming pidió consejos a otros especialistas en el cuidado de personas con demencia sobre cómo sacar a sus seres queridos al mundo de forma segura.