La Organización Mundial de la Salud (OMS), recomienda el uso de mascarillas a niños mayores de 12 años y entiende que no es necesario que aquellos otros que tengan entre 5 y 11 la usen, a menos que existan registros de transmisión intensa en su zona de residencia. Asimismo, indica que no se debe exigir a los niños menores de 5 años a llevar mascarilla protectora, por su incapacidad de llevarla correctamente y asegurar un mínimo de protección.

Sobre la base de informes disponibles, la Organización Mundial de la Salud llegó a la conclusión que deben atenderse las necesidades psicosociales de los bebés y no debe cubrirse ni su boca ni su nariz. La organización entiende que cualquier niño, con síntomas que sugieran la presencia de la COVID-19 debe usar mascarilla, siempre que pueda tolerarla.

El niño debe ser colocado en aislamiento y el personal de la salud vinculado tendrá que ser monitoreado constantemente, aún si se presentan síntomas leves. Los familiares y los cuidadores de un niño enfermo deben, obligatoriamente, usar mascarilla protectora.