Tal y como explican los expertos en domótica de Loxone, integrar la iluminación dentro de una casa inteligente hace que, a parte del ahorro en luz, logremos nuevas funciones para el hogar que hoy día cobran gran importancia. Estos son algunos de los beneficios principales de usar una iluminación inteligente en el hogar:

Ahorro en electricidad: al salir de una habitación o de la casa, las luces se apagan de forma automática, ya sea por tiempo, por presencia o por cierre centralizado.

Ahorro en tiempo: muchas veces nos recorremos la estancia para asegurarnos de que no nos dejamos ninguna luz encendida. Para evitarlo, tenemos la opción de poder apagar todas las luces de casa al mismo tiempo. Esta función puede realizarse desde un pulsador de forma manual, por presencia, a través de una llave electrónica o app móvil.

Mayor confort: para crear ambientes adaptados a cada actividad. Con un solo “clic” se combinan lámparas, colores e intensidades.

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